lunes, 6 de agosto de 2012

Prometheus: trepidante, pretenciosa, brillante, genial…

Lo primero que piensa un aficionado al cine que conozca un poco la trayectoria del director Ridley Scott al ver 'Prometheus' es porqué lleva treinta años perdiendo el tiempo con obras menores en lugar de ser fiel al género que le encumbró como un gran autor. Cómo es posible que un director capaz de filmar obras maestras contemporáneas como 'Alien, el octavo pasajero' (1979) y 'Blade Runner' (1982), reniegue durante tantos años de la ciencia ficción para filmar estéticas producciones del montón y algunas de las películas más aburridas y pesadas de los últimos años.

Scott lo justifica con una extraña excusa: “el motivo por el que no he hecho otra película de ciencia ficción durante tantos años, además del hecho de que he estado ocupado haciendo otro tipo de filmes y explorando nuevos géneros, es porque no he encontrado algo que tuviera la suficiente verdad como para que mereciera la pena dirigirlo”.

El punto de partida de la historia nos acerca a un equipo de arqueólogos que descubren restos pictóricos similares en antiguas civilizaciones a pesar de estar geográficamente distantes. Esto les hace enunciar una loca teoría de la evolución que tira por tierra las tesis darwinistas de la evolución de la especie humana. Esa será la excusa para navegar en la impresionante nave 'Prometheus' en busca de vida inteligente en el espacio. En minutos, la película ya nos ha trasladado a un extraño planeta donde encontrarán respuesta a sus descabelladas teorías.

La acción es en todo momento vertiginosa con abundantes decorados evocadores de la pluma de H. R. Giger, incluso aparece un modelo funcional de la consola del 'navegante estelar' que apareciera fosilizado en las primeras secuencias de 'Alien'. También, es posible asistir al despegue sobrecojedor del 'Juggernaut', la nave en forma de media de luna de diseño similar a la que apareciera estrellada en el 'Octavo pasajero'.

Se agradecen este tipo de producciones en las que se intenta, en la medida de lo posible, huir de los efectos digitales, lo que obliga a realizar costosas réplicas de los decorados y el interior de la naves. Tal es así, que el equipo de producción necesitó hasta cinco hangares de los estudios Pinewood de Londres para dar cabida a las creaciones del film. No obstante, cuando su uso se impone resulta apabullante, especialmente en lo que se refiere a los motores y las consolas de las naves o para dar vida a las representaciones holográficas de las cartas de navegación alienígenas.
El androide David alimenta su intelecto.

Los actores están correctos y Michael Fassbender, soberbio, en el papel del androide David. Tan hierático como irónico según el momento y, cuando el argumento lo requiere, hasta cruel y vengativo. En palabras del propio actor: "soy el mayordomo espacial de la tripulación. Soy casi invisible para la tripulación. David intenta abrirse a ellos y eso provoca situaciones incómodas. Todos tienen su propio plan, incluso él. Para David, el resto son también máquinas bien diseñadas".

El tener que rodar en el mismo plató donde en 1985 realizó la pequeña joya del cine fantástico que es 'Legend', ha insuflado un talento renovado a Ridley Scott para crear una película trepidante que dejará satisfechos a los seguidores de la saga y del género. Pero no sólo eso sino que también deslumbrará a los nuevos espectadores que se acerquen a conocer qué es eso de la saga alien de la que tantos hablan. Para Scott, "no hace falta ser seguidor de la saga para disfrutar plenamente de la película pero, si lo eres, vas a encontrar muchas incógnitas de Alien resueltas aquí y también verás cómo se abren algunas nuevas".

El único pero que se le puede poner es un final con varios epílogos que pretenden hilar todo con la película de 1979. Esta serie de guiños argumentales hacen algo irregular y previsible el cierre del film.


¿De dónde viene la alegoría Prometheus?
En la mitología griega, Prometeo es el titán amigo de los mortales, honrado principalmente por robar el fuego de los dioses para entregarlo a los hombres por lo que fue castigado por Zeus. Era hijo de Japeto y la oceánide Asia o Clímene (hay divergencia sobre cuál de las dos), según el relato, hermano de Atlas, Epimeteo y Menecio a los que superaba en astucia y virtud. Es considerado el protector de la civilización humana por proporcionar el fuego e inventar el sacrificio. En Atenas se le dedicó un altar en la Academia de Platón donde se celebraba una carrera de antorchas en su honor cada año.

"La metáfora central de la película gira en torno a Prometeo, el titán de la mitología griega, que por desafiar a los dioses fue castigado. Su delito: proporcionar a los hombres el conocimiento del fuego. En la película se alude al mito clásico para simbolizar la relación del ser humano con los dioses y lo que sucede cuando se les desafía", explica Ridley Scott.
Espectacular holograma con las cartas de navegación de los alienígenas.
Prometheus 
Dirección: Ridley Scott.
Año: 2012.
Duración:125 min.
Género: acción, ciencia ficción.
Interpretación: Noomi Rapace (Elizabeth Shaw), Charlize Theron (Meredith Vickers), Michael Fassbender (David), Guy Pearce (Peter Weyland), Idris Elba (Janek), Logan Marshall Green (Charlie Holloway), Rafe Spall (Millburn), Sean Harris (Fifield), Emun Elliott (Chance), Benedict Wong (Ravel), Patrick Wilson (padre de Shaw).
Guion: Damon Lindelof y Jon Spaihts.
Producción: Ridley Scott, David Giler y Walter Hill.
Música: Marc Streitenfeld.
Fotografía: Dariusz Wolski.
Montaje: Pietro Scalia.
Diseño de producción: Arthur Max.
Vestuario: Janty Yates.

Noticias relacionadas: Vuelve la mejor ciencia ficcion al cine gracias al 'Prometeo' de Ridley Scott

No hay comentarios:

Publicar un comentario