La sencillez de uso es la gran seña de identidad de la nueva gama de Smart TV. Se conectan fácilmente a Internet y permiten sintonizar los canales de forma muy intuitiva. Incluye el mando 'Magic control', que ahora ha sido mejorado, por lo que resulta más fácil manejar los menús de navegación. Además, es compatible con cualquier dispositivo de cualquier marca. También, conserva las funciones básicas de su antecesor: voz, gesto, puntero y scroll, pero incorpora una mejorada versión de la funcionalidad 'Voice mate'. Esta opción es capaz de reconocer los comandos de voz en el tono de una conversación.
El sistema permite organizar los gustos de cada miembro de la familia entre los más de 400 canales en 'Smart world', los contenidos tridimensionales de '3D world' y los juegos de 'Game world'. También es posible navegar por Internet, leer los correos electrónicos mientras se ve el televisor, estar en contacto con los amigos o comentar con ellos, en tiempo real, lo que se está viendo a través de las redes sociales.
La conectividad es otra de las características destacadas de los Smart TV, lo que hace posible copiar o enviar todo tipo de contenidos a cualquier dispositivo vinculado a la televisión. Entre las opciones de conectividad, es posible acceder a los archivos mediante WiDi, Miracast y NFC. WiDi permite duplicar la pantalla del ordenador en el televisor. Por otro lado, Miracast duplica en la pantalla grande lo que se está viendo en el smartphone. Mientras que NFC hace posible enviar al televisor las fotos de los mejores momentos.
El acceso a la nube es otra de sus prestaciones, con hasta 5 Gigas de almacenamiento gratuito en 'LG Cloud'. Esto permite acceder a contenidos en alta definición, cargados desde cualquier lugar del mundo, para disfrutar de las películas o fotos en cualquier lugar y en cualquier momento.
Las nuevas Smart TV tienen unos precios que van desde las 32 pulgadas, a un precio de 339 euros, al modelo más grande, de 84 pulgadas, que cuesta 19.000 euros.
